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La alta cocina también se lee: cuatro deliciosos libros para paladares exquisitos
Texto: Andrés Rubín de Celis
ENTRANTE:
Sollos. La cocina de río
Diego Gallegos (Montagud). Este estrellado chef brasileño anima en su libro a incorporar a los fogones españoles los pescados de río, valoradísimos en la gastronomía de su país. Un concepto innovador, sostenible y gustoso que aporta sabores, texturas e incluso colores de temporada siguiendo a la moda. ¿Morcilla de sangre de esturión? No pongas cara rara…
PRIMER PLATO:
Tu ensalada para llevar
Bérengère Abraham (Cúpula). ¿Odias el tupper pero no te queda otra que convivir con él? Entonces este es tu libro: 45 recetas de ensaladas que se desmarcan de la aburrida fórmula lechuga-tomate-cebolla. ¡Y encima en tarro!
PLATO PRINCIPAL:
Carne picada
Leonardo Lucarelli. Con la cocina en un pedestal, hace tiempo que echábamos de menos la visión no complaciente de un insider. En la de este cocinero no faltan aprendices explotados, chefs adictos y dueños inútiles. Lucarelli es afilado como un cuchillo trinchador.
POSTRE:
El club de los gourmets
Junichiro Tanizaki (Gallo Nero). Hartos de los placeres de la buena mesa, cinco amigos glotones van en busca de nuevos estímulos culinarios. Un relato poco conocido de unos de los grandes japoneses y tan agridulce como la mejor cocina asiática.
Letra de cambio
Use Lahoz
El escritor confiesa sus lecturas de hamaca.
Decía Flaubert que la forma más segura de placer es la ilusión. A estas alturas, que las vacaciones se nos escapan y que leer a gusto no ha sido tan fácil como parece, es hora de recordar las veces que, con ilusión, dijimos: “Este, para verano”. Los libros de hamaca deben impedir que nos levantemos de la tumbona y al tiempo, transportarnos muy lejos de ella. Vernon Subutex 1 (Mondadori) de Virginie Despentes, es como un amigo que te cuenta batallas de un viejo compañero de fiestas. La ciencia ficción distópica que Niccolo Ammaniti cultiva en Anna (Anagrama) nos lleva a una Sicilia devastada donde la protagonista, acribillada por los bandazos del deseo, protegerá a su hermano hasta devolverle al agua. Con Besos a la luz de la lona (Demipage) te recolocarás las gafas de sol: combates literarios entre escritores atraídos por el boxeo, ese territorio tan metafórico como el verano.
*FOTOS: MIKEL PONCE. ILUSTRACIÓN: YOKO NAKAJIMA. ILUSTRACIÓN USE LA HOZ: CARLA FUENTES…
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